Al principio de los años 50 Giuseppe Pattoni dió vida a esta bicilindrica, primero con 250, depués con 350 y finalmente con 500 ccm. Logró cosechar varios títulos italianos e internacionales, algo muy loable, si se tiene en cuanta que construía estas motos por su cuenta después de su jornada laboral normal.
La BIC 500 8V RU al desnudo, magnífica estampa.
Roberto Pattoni, hijo del legendario creador, ha sido aclamado por los fans de la marca para volver a crear motos de competición, lo ha hecho y esto os lo comentaremos en un próximo post.
Un motor extremadamente moderno y potente para la época.
Más en la web de Paton.
Qué preciosidad